21 d’agost del 2005

21/08/2005 - Punta Alta

Llegamos de madrugada al parking del Embalse de Cavallers (1785 m) junto a la abandonada Residencia Enher, hacemos un te y nos ponemos a dormir.

Por la mañana nos levantamos bastante pronto y después de almorzar algo y reorganizar la mochila nos ponemos en marcha.

Volvemos por la carretera hasta encontrar la entrada de una pista y la seguimos hasta pasar unos 100 metros de la quinta curva, donde encontramos una fita que nos indica la entrada a la canal de Comalesbienes.

La ruta va ganando altura a través de un camino sinuoso y arrasado por la erosión. Cuando llegamos hacia el final de la canal Gordo que va en cabeza se pone a grimpar por una canaleta y yo lo sigo. Al llegar Lluis nos advierte de que una flecha roja que no hemos visto nos indica que el camino sigue por la derecha. Superada la barrancada cruzamos un bosque con el camino bien definido. Al salir del arbolado se atraviesa un laberinto de bloques que se difumina entre los rododendros y acercándose al torrente llega al Estany Gran de Comalesbienes (2580 m).

Después de un descanso para recuperarnos seguimos la marcha bordeando el lago por el norte, alcanzado el promontorio que domina la cuenca. La niebla, ahora, lo tapa casi todo y seguimos lo que nos parece que es el camino correcto bordeando el lomo de una cresta para llegar, por un camino que asciende hasta el collado que une los picos de Comalesbienes (2997 m) y Punta Alta. Desde aquí continuamos por la cresta llegando en unos pocos minutos a la cima de Punta Alta (3014 m).

La vista sobre el cresterio de los Besiberris queda bastante tapada por una niebla que a momentos nos ha dejado disfrutar de unas panorámicas excelentes. Estamos solos en la cima, pero la ilusión dura lo que dura hacer la foto de rigor. En pocos minutos una invasión de unas veinte personas nos toma el relevo por lo que nos decidimos a bajar enseguida.

Seguimos un poco la cresta y en un momento desde el primer cuello descendimos por el Barranc de Comalespada. No aconsejo a nadie bajar por aquí. Las fitas, o son casi inexistentes, o nosotros no vimos muchas, el camino es feo y aburrido y ya casi abajo, sobre la cabecera del Embalse de Caballers tuvimos que desgrimpar un poco sobre terreno húmedo y descompuesto ya que supongo que nos despistamos y no seguimos el camino correcto.

Una vez abajo, sobre el camino solo queda bordear el Embalse y llegar por fin al parking.